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Increíble, al menos 20 mujeres, de entre los 18 y 45 años de edad, cayeron en los malévolos planes de Carlos Márquez, quien les prometía empleo y jugosos dividendos, si a cambio sostenían relaciones sexuales y eran grabadas, cuyos vídeos supuestamente luego serían comercializados en el extranjero.
Sin embargo, lo que desconocían las mujeres víctimas de estas promesas, es que Márquez luego utilizaba estos vídeos íntimos para extorsionarlas.
La historia
El comandante de la Policía Metropolitana de Tunja, coronel Carlos Triana, contó los detalles de cómo Márquez logró que las féminas cayeran en la trampa. Tal parece que el individuo utilizaba redes sociales, como Facebook, para ofrecer empleo con remuneraciones millonarias, esto solamente a mujeres de determinada edad.
Las incautas mujeres, creyendo que el empleo era digno, se contactarían telefónicamente o por Facebook con Márquez, quien las citaba para explicarles qué debían hacer, en este caso indicándoles que deberían grabar contenido pornográfico, cuyos vídeos les prometía que serían distribuidos en el extranjero y cuyos rostros de las féminas serían ocultados.
Exigencias económicas Así las cosas, el hombre les exigía a las mujeres un computador y celulares de alta gama. Las citaba en un hotel del norte de Tunja o en otro ubicado cerca al sector de Los Hongos.
En las habitaciones, el hombre les indicaba que debía ingresar un programa al computador o celular para que las mujeres, una vez terminaran la sesión sexual, verificaran los pagos posteriores o consignaciones de dinero a sus cuentas bancarias, salarios que superarían los 3 millones 600 mil pesos mensuales o incluso quincenales.
Lo que las mujeres desconocían es que una vez grababan las escenas con Márquez, este les quitaba el computador y celular con pretextos. De esta manera, luego contactaba a las mujeres, indicándoles que si no consignaban determinada cantidad de dinero, subiría los vídeos a las redes sociales de sus amigos o familiares, por lo que las víctimas terminarían accediendo a los pagos.
No obstante, al menos cuatro mujeres víctimas de este presunto y depravado extorsionista, lo denunciaron. El Gaula de la Policía empezó las investigaciones que terminaron en su captura cuando realizaba el retiro de un dinero, presuntamente producto de la extorsión, en una casa de giros ubicada en el barrio Los Patriotas de Tunja.
El coronel Triana hizo un llamado a las demás mujeres que hayan sido víctimas de Carlos Márquez, para que se acerquen y lo denuncien, ya que la Fiscalía y autoridades mantendrán la reserva del nombre.
Lo anterior para lograr una contundente judialización y pena carcelaría.